
Se trata de una modificación que de acuerdo con la Constitución Española no exige necesariamente la celebración de un referéndum vinculante.
Este asunto es de tal importancia y va a ser tan determinante para nuestro futuro que le pido que si esta modificación es finalmente aprobada por las cámaras, su grupo parlamentario se comprometa a solicitar que esta reforma sea sometida a referéndum para su ratificación tal y como recoge el artículo 167.3 de la Constitución Española.
Ahora resulta que la Constitución sí que se puede cambiar: para ello sólo es necesario que lo pidan Merkel y Sarkozy y ¡zas!, ¡manos a la obra!, los grandes partidos, PSOE y PP, los dos de acuerdo en la enorme conveniencia del cambio.
ResponderEliminarReformar la constitución para establecer techos de deuda a las autonomías supone un grave retroceso, supone des-autonomizar nuestras autonomías, restringir los gastos en sanidad, educación, servicios contra-incendios, obras públicas... ¡por eso quieren hacerlo sin referendum, por la puerta de atrás, y deprisa y corriendo!
¡Pero no lo harán con mi consentimiento!
Sentidamente desinquieto,
Antonio GO